El día de las elecciones

 Antes de las elecciones, los que estaban sentados en las butacas de los ayuntamientos y parlamentos de las comunidades autónomas, robaban, estaban al servicio del poder, tenían unos privilegios sobre la ciudadanía, tanto los que estaban en el poder, como los que lo alimentaban en la oposición, ahora las butacas han bailado y han cambiado posiciones, pero se seguirá robando igual, se seguirá al servicio del poder, seguirán con sus privilegios y estarán amparados en una Ley Electoral injusta.

Personalmente el resultado de estas elecciones me da lo mismo, y podréis criticarme por lo que muchos considerareis una burrada, pero es mi pensamiento, supongo que algún honrado y honesto político existirá en algún pequeño partido de algún pequeño pueblo pero el resto, sinceramente me da exactamente lo mismo como jueguen en ese baile de sillas, no son honestos, no son honrados, son muy corruptibles, forman parte de la casta política, su misión simplemente es jugar al circo mediático con nosotros, estar al servicio de los que realmente mandan, la familia March, la familia Botin… por este servicio cumplido se llevan un suculento pedazo de la tarta.

Se ha sembrado una semilla por las plazas de todo el mundo, es la semilla de un mundo mejor, una semilla que no entiende de siglas políticas, una semilla que se emponzoña cuando escucha comentarios como “ha ganado el PP que desastre de elecciones”, pues eso pertenece a lo viejo, y lo que queremos es lo nuevo, ese tipo de comentarios, alimentan lo viejo, alimentan la dualidad, alimentan el circo electoral, alimentan el odio, alimentan el miedo, alimentan las mentiras, que es todo lo que representan las siglas PP-PSOE-IU-CIU y alguno mas que no recuerdo. porque esa semilla no entiende lo viejo, se ha sembrado para que de paso a lo nuevo, entonces hablémosle de lo nuevo. 

Esa semilla hay que regarla, con amor, con unidad, con respeto, con honestidad, con libertad, y crecerá para que tengamos un mundo mejor. Queda mucho trabajo por hacer pues esta germinando aun, pero en eso consiste la vida, en trabajar, en caminar.

Vivimos un tiempo de cambio maravilloso, todos los días aprendo algo, todos los días algo cambia dentro de mi, observo, escucho, analizo y mi pensamiento, mi sentir, se va formando, si alguien sigue mis divagaciones, se dará cuenta que algunas parcelas de mi pensamiento pueden cambiar de un día a otro, y es debido a que estamos ante una potente energía de cambio, que debemos aprovechar, dejándola que resuene en nuestro interior sin tener miedo a cambiar, abrazando lo nuevo.

Este cambio es confuso, es difícil cambiar siempre, pero la semilla esta plantada, y hay que darla una oportunidad, es mas lo que nos une que lo que nos separa, y si hay cosas que no me gustan en este movimiento, pero otras me encantan, y por eso voy a seguir con mi apoyo, porque quiero cambios, porque quiero un mundo mejor.

El domingo mas que la resaca electoral, el cansancio acumulado hizo mella en mi, la radiante energía que en sol se vive se convierto en pesadez, mas que por los demás por mi cansancio acumulado. Después de escuchar una asamblea, las cuales me parecen largas, aburridas, emocionantes, tediosas, con momentos interesantes, con momentos ladrillazos, con propuestas bonitas, con propuestas absurdas, con propuestas interesantes, para mi lo realmente importante es estar en la plaza, es compartir opinión con el de al lado, es hacernos oír, es decir estamos aquí porque hemos despertado, todos queremos unas cosas muy claras que están solicitadas desde la manifestación del 15 M, las asambleas están bien, porque esta muy bien debatir, pero creo que se esta teniendo un afán de hacer política por hacer política desmesurado, y la política, a mi personalmente me cansa, se que es necesaria, pero me cansa. Así que el domingo cansado de tanta política, entre la de los políticos y sus elecciones, la del pueblo y las asambleas, me fui a dormir cansado y con un sabor agridulce.