martes, 1 de febrero de 2011

Encontrando

Encontrando caminos, he visto el sol, encontrando caminos La Maliciosa despuntaba nevada, encontrando caminos me han dado los buenos días, encontrando caminos Jane me ha vuelto a demostrar la felicidad del tiempo presente, encontrando caminos he subido una montaña, he cruzado un rió, encontrando caminos he sentido mis piernas, he sentido mi piel, he sentido mi cuerpo, he sentido mi forma física, 

Buscando la salida, los sueños se ahogaron en la barra de un bar, se ahogaron respirando en los azulejos rotos de los servicios mal olientes, vencido por la cabeza, esa cabeza que gozaba con el automaltrato, la misma cabeza que encarcelaba el alma, enfadado con el mundo y lleno de rabia, mate mi cuerpo, mate mi alma, mate mi corazón.

Encontrando caminos llegué a la sierra, y volví a buscar, buscando me ahogué en las mismas barras, en los mismos bateres, la noche de la sierra me hizo encontrar las estrellas, el día de la sierra me hizo encontrar el sol, el viento de la sierra me hizo encontrar personas, poco a poco me empezó a inundar la energía, empecé a sentir mi corazón, empecé a sentir mi alma, mientras seguía buscando me tropezaba en pozos, que me desgarraban las entrañas, me levantaba una y otra vez, los momentos de lucidez me hicieron encontrar el corazón y el alma, la cabeza siempre presente continuo maltratando mi físico, mi cuerpo, mi sexualidad.

Con el corazón contento, con el alma presente, con el físico herido, con la venas reventadas de antibióticos, con el hígado a punto de estallar, con mi cuerpo hinchado de cortisona, encontré unos ojos, que me miraban a lo lejos, unos ojos brillantes, unos ojos inquietos, unos ojos tranquilos, unos ojos de águila, unos ojos conocidos sin conocerte.

Esos ojos inconscientemente me hicieron encontrar un nuevo pueblo, esos ojos me hicieron encontrar momentos de serenidad,esos ojos me hicieron encontrar sabores, esos ojos me hicieron encontrar olores, esos ojos me hicieron encontrar sitios mágicos, esos ojos me hicieron encontrar un corazón bonito, un corazón desgarrado, un corazón precioso, otro encuentro causal con esos ojos me hicieron encontrar un alma.

Y volví a encontrar ese alma, mis manos dieron la vuelta a su piel morena, por cada poro brotaba la luz de ese alma, mi boca se inundo de ese alma, la habitación se ilumino, las sabanas se acartonaron de amor, por encima de nuestras pieles, nuestras almas se abrazaban.

Esos ojos plantaron delante de mi espejos, plantaron delante de mi miedos, plantaron delante de mi sombras, pero sobre todo me dieron mucha luz.

Mire con valentía sincera esos espejos y me hicieron encontrar caminos, caminos perdidos nuevamente encontrados, caminos con subidas, caminos con bajadas, caminos con rocas, caminos verticales, es lo que tiene vivir en la falda de montaña.

Por las mañanas contemplo mi cara y mi cuerpo desnudo en el espejo, veo como el caminar a curtido mi cara, como mi cuerpo esta mutando, se desincha, se perfila, se fortalece, mis tripas ya no están rotas, el espejo ya no refleja esos ojos, pero si tiene un halo de ese alma.

Hoy vuelvo a estar fuerte para encontrar caminos, para encontrar mi cuerpo, para encontrar mi alma, para encontrar mi corazón, para encontrar ojos.

2 comentarios:

Unknown dijo...

Bellísimo.

Unknown dijo...

este es el q mas te identifica, muy guapo..... el nuevo loriga de la sierra